jueves, 16 de mayo de 2013

VICTIMAS POR CONFLICTO ARMADO

Habiendo transcurrido ya más de diez años desde la aprobación de la Convención sobre los
Derechos del Niño, algunos países de las Américas y muchos en el mundo entero, contemplan con
estupor como muchos niños, niñas y adolescentes son reclutados para prestar servicios militares y
combatir, en flagrante violación a los derechos humanos fundamentales que les han sido
consagrados. El Interés Superior del Niño se desvanece ante la sola idea de que niños, niñas y
adolescentes empuñen armas para matar y para ser matados.


Un bajo nivel socio-económico facilita la incorporación de niños y adolescentes como soldados en el
conflicto. Muchos de ellos se incorporan voluntariamente para sobrevivir o para vengar las
atrocidades cometidas contra su familia o su comunidad, pero también se presenta el fenómeno de
padres de familia que, ante una aguda crisis económica venden a sus hijos como soldados,
generalmente a los grupos armados de oposición.


En cuanto a desplazamiento forzado, el registro histórico de la Unidad de Atención a Víctimas, a diciembre de 2012, indica que un 36 por ciento de la población desplazada tenía entre 0 y 17 años al momento de tener que dejar sus lugares de origen.
Sobre el secuestro, las cifras del Ministerio de Defensa registran, a noviembre de 2012, 2.107 menores de edad secuestrados: 1.058 mujeres y 1.049 hombres. “Sin embargo, los sistemas de información actuales no permiten discriminar con exactitud cuántos de ellos fueron secuestrados con ocasión al conflicto armado”


www.elpais.com.co/.../ninos-son-principales-victimas
-... www.lapatria.com/.../los-ninos-victimas-del-conflicto-...

miércoles, 15 de mayo de 2013

maltratos violencia y noviasgo

Víctima, en primer término. es todo ser viviente sacrificado o destinado al sacrificio. Sin embargo, desde el punto de vista utilizado habitualmente, una víctima es la persona que sufre un daño o perjuicio, que es provocado por una acción u omisión, ya sea por culpa de otra persona, o por fuerza mayor.[1]
Una víctima es quien sufre un daño personalizable por caso fortuito o culpa ajena.[2] El victimista se diferencia de la víctima porque se disfraza consciente o inconscientemente simulando una agresión o menoscabo inexistente; y/o responsabilizando erróneamente al entorno o a los demás


Las victimas de violencia en las relaciones de noviazgo se definen como todo ataque intencional de tipo sexual, físico o psicologico, de un miembro de la pareja contra el otro o en contra la suegra por andar de metiche,chismosa etc. en una relación de noviazgo con el objeto de controlar o dominar a la persona. Una relación con estas características suele denominarse noviazgo violento.

victimas



martes, 14 de mayo de 2013

La huella física que dejan las enfermedades mentales en el cerebro


pacientes con ciertas patologías

Los pacientes que sufren estrés postraumático parecen tener una parte de su cerebro (el hipocampo) algo atrofiada. En el caso de la esquizofrenia, la enfermedad produce un cierto 'adelgazamiento' del lóbulo frontal; mientras que en las fases iniciales del Alzheimer se puede observar otro tipo de alteraciones en zonas relacionadas con la memoria. Éstas son sólo algunas de las pistas que comienza arrojar el campo de la neuroimagen sobre la huella que dejan las patologías mentales en la estructura y las funciones de nuestro cerebro.


Imagen de resonancia magnética de un sujeto con talento matemático (Foto: Laboratorio de imagen Hospital Gregorio Marañón)


trastornos mentales


Una imagen vale más que mil palabras, y un icono también. Patrick Smith ha intentado expresar en seis pósters el enigma de algunos trastornos mentales. Para ilustrar las características de cada uno de ellos ha utilizado el mínimo de elementos. Juzga tú mismo si lo ha conseguido. De arriba abajo y de izquierda a derecha, representan la narcolepsia, los ataques de sueño frecuentes durante el día; la agorafobia, el miedo a los espacios abiertos; el trastorno disociativo de identidad (lo que se conoce como personalidad múltiple); la depresión, la anorexia y el trastorno obesivo compulsivo

www.metodosilvadevida.com/ansiedad

victima perfecta

víctimas perfectas


Muchas sólo hablan español, viven en campamentos aislados o apartamentos, son indocumentadas y trabajan en el campo

Al igual que millones de mexicanos, Catalina Rodríguez soñaba con llegar a los Estados Unidos para trabajar durante algunos años en una granja, ahorrando suficiente dinero para construir una pequeña casa para su familia, una vez que estuviera de vuelta en su hogar en el estado mexicano de Morelos. Y también, como los millones antes que ella, tenía que cruzar la frontera. Ella y otros nueve mexicanos pagaron 2,500 dólares cada uno a un coyote (traficante) para cruzar a través de la frontera en 2004.
“Caminamos durante tres días”, dijo. “Me quedé sin comida, sin agua… me torcí el tobillo”. Pero no se atrevió a detenerse. “Pasamos por personas que estaban muertas”, dijo. Ella lo logró y finalmente se unió a su marido, que ya estaba trabajando en una granja en las afueras de Rochester. El trabajo agrícola es exigente. Catalina trabajaba durante diez o 12 horas al día, seis o siete días a la semana, durante la siembra y cosecha. Pero ella esperaba eso. Lo que no esperaba era el acoso sexual casi constante que sufría en el trabajo. Su jefe de equipo “tocaba a las mujeres de una manera sexual”, dijo. “Tocaba a las mujeres en sus traseros”. Cuando ella lo amenazó con denunciarlo, él le advirtió: “Van a deshacerse de ti. Y si vas con el jefe, voy a llamar a inmigración”. Ella no le dijo a su jefe y tampoco le dijo a su marido. “Las mujeres tienen que tolerar eso en silencio”, dijo. “Si uno habla y pierde su trabajo, entonces, ¿qué?”. Dos informes recientes -uno de Human Rights Watch y otro del Southern Poverty Law Center- han detallado el acoso sexual y el abuso de los trabajadores agrícolas femeninos.
08-Comunidad
La mayoría de las mujeres entrevistadas dijeron que habían experimentado alguna forma de acoso sexual, que incluye de todo, desde el acoso verbal hasta la violación.
La situación es tan grave en algunas granjas de California y Florida que los campos son llamados “el Motel Verde” o “el Campo de las Pantis”. Muchas creen que para mantener su puesto de trabajo, deben tener relaciones sexuales con supervisores. El informe SPLC define a las mujeres trabajadoras del campo como “víctimas perfectas”. Muchas sólo hablan español, viven en campamentos aislados o apartamentos y son indocumentadas.
Ellas temen que si hablan, van a ser despedidas o, peor aún, deportadas. La mayoría están apoyando no sólo a su familia inmediata, sino a una familia en México y otros países latinoamericanos. Perder su trabajo sería un desastre para su familia, por lo que permanecen en silencio.
Anita Martínez es otra trabajadora que fue objeto de acoso sexual en el trabajo. Ella mencionó que su hermana y su sobrina querían venir a los Estados Unidos. “Les dije que no vinieran”, dijo. “Estados Unidos no es un lugar bonito. Es como una prisión. Vivir aquí es sufrir”.
*Los nombres han sido cambiados para proteger su identidad